Con ese objetivo, los semáforos se instalarán en
ciertos intervalos a lo largo del trayecto para comprobar si los sensores y
dispositivos de procesamiento de imágenes presentes en los autos consiguen
reconocer o no las señales de tránsito.
Entretanto, varias intersecciones y nuevos caminos
cuesta arriba con poca visibilidad se concebirán para contribuir al desarrollo
de tecnologÃas capaces de anticipar peligros potenciales, tales como peatones o
animales que aparecen súbitamente en frente del vehÃculo, además de recrearse
las malas condiciones causadas por fenómenos naturales.
Aunque la mayorÃa de los fabricantes de automóviles
tienen sus propios circuitos de prueba, hasta ahora la experimentación con los
vehÃculos autónomos no puede efectuarse en la vÃa pública a menos que
conductores con licencia vayan a bordo y dichos prototipos cumplan con las
normas de seguridad.
"Hay algunos peligros que la tecnologÃa actual de la
conducción autónoma no puede detectar, incluso si los humanos pueden notar con
facilidad esas amenazas", dijo un funcionario del Ministerio de EconomÃa,
Comercio y Ministerio de Industria.
|